[vc_row][vc_column][vc_column_text]El Comité de hoy se lo dedicamos a un bicho raro, a un friki de la naturaleza. En 2019, el jardín zoológico parisino, el Zoo de Vicennes, anunció una exclusiva mundial: la exhibición de una «mancha», una misteriosa criatura unicelular de color amarillo que apareció hace 500 millones de años. No es un animal. Ni una planta. Pero se mueve y tiene una cierta inteligencia. Los mohos mucilaginosos.[/vc_column_text][vc_empty_space][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]Empezamos por el sexo. Si pensabas que tu experiencia en Tinder fue difícil, las citas por mohos de limo son una pesadilla porque le cuesta, y mucho, encontrara una apareja compatible. Pero la parte verdaderamente fascinante es su capacidad para percibir y adaptarse rápidamente a su entorno, un comportamiento que podríamos llamar, a falta de una palabra mejor, aprendizaje.[/vc_column_text][vc_empty_space][vc_row_inner][vc_column_inner width=»1/2″][vc_single_image image=»14370″ img_size=»400×400″ style=»vc_box_border_circle_2″ onclick=»link_image»][/vc_column_inner][vc_column_inner width=»1/2″][vc_single_image image=»14371″ img_size=»400×400″ style=»vc_box_border_circle_2″ onclick=»link_image»][/vc_column_inner][/vc_row_inner][vc_empty_space][vc_column_text]Es capaz de moverse a una velocidad de 1 cm / h, a pesar de la ausencia de alas o extremidades. Coloniza principalmente bosques y zona húmedas y tiene la particularidad de poder multiplicarse o dividirse a voluntad. En teoría, es inmortal. Para la exhibición, se le buscó un nombre: The Blob, inspirado en una película de terror de ciencia ficción estadounidense de 1958.[/vc_column_text][vc_empty_space][vc_column_text text_align=»center»][/vc_column_text][vc_empty_space][vc_column_text]Está protagonizada por Steve McQueen y Aneta Corsaut. Fue distribuida por Paramount Pictures (como «La masa devoradora» en España) en una función doble con Me casé con un monstruo del espacio exterior.
La película, a su vez, se basa en una historia real. En 1950, cuatro policías de Filadelfia informaron del descubrimiento de «un disco abovedado de gelatina temblorosa, de 6 pies de diámetro, un pie de grosor en el centro y una o dos pulgadas cerca del borde». Cuando intentaron recogerlo, se disolvió en una «espuma pegajosa e inodoro». Probablemente fuera gelatina de estrella, una sustancia que a veces se encuentra en la hierba o las ramas de los árboles.[/vc_column_text][vc_empty_space][vc_row_inner][vc_column_inner width=»1/2″][vc_single_image image=»14372″ img_size=»400×400″ style=»vc_box_border_circle_2″ onclick=»link_image»][/vc_column_inner][vc_column_inner width=»1/2″][vc_single_image image=»14373″ img_size=»400×400″ style=»vc_box_border_circle_2″ onclick=»link_image»][/vc_column_inner][/vc_row_inner][vc_empty_space][vc_column_text]Y, como siempre, un libro. En este caso es el catálogo de una exposición, Ciencia Fricción, del CCCB.[/vc_column_text][vc_empty_space][vc_column_text][/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]